Dice el Señor: Yo soy el Alfa y el Omega, yo soy el principio y el fin (Apocalipsis 1:5-8) – Bosquejo Bíblico

Introducción

Probablemente Juan fue el autor del libro de Apocalipsis, se cree que lo escribió cuando él estaba desterrado en la isla de Patmos.

El libro de Apocalipsis, también es conocido como el “Libro de las Revelaciones”, es un libro escatológico, de carácter exclusivamente profético. Jesucristo se describe a si mismo haciendo una afirmación “Yo soy el alfa y la omega, el principio y el fin” Apocalipsis 1:8.

Jesucristo es la eternidad encarnada, él es pasado, es el presente y es el futuro. Por esta razón Cristo no ha sido creado, siempre existió. Él no está regido por el tiempo, Dios existe fuera de toda noción de tiempo, solo podemos aplicar conceptos de tiempo a las criaturas que son creadas y que tienen un fin.

Aspectos esenciales sobre Apocalipsis 1:5-8

  1. Jesucristo es el primogénito de los muertos, es el primero y el último. «y de Jesucristo el testigo fiel, el primogénito de los muertos, y el soberano de los reyes de la tierra…» (Apocalipsis 1:5).
  2. Es el principio y también el final y fuera de él no hay Dios. «Así dice Jehová Rey de Israel, y su Redentor, Jehová de los ejércitos: Yo soy el primero, y yo soy el postrero, y fuera de mí no hay Dios.» (Isaías 44:6).
  3. Él es, el que estuvo muerto, el que resucitó y él que reina. «Y escribe al ángel de la iglesia en Esmirna: El primero y el postrero, el que estuvo muerto y vivió, dice esto.» (Apocalipsis 2:8).
  4. Jesucristo está desde el principio y será nuestro juez en el final.«¿No eres tú desde el principio, oh Jehová, Dios mío, Santo mío? No moriremos. Oh Jehová, para juicio lo pusiste; y tú, oh Roca, lo fundaste para castigar.» (Habacuc 1:12).
  5. Jesucristo es el Alfa y la Omega, principio y fin. «Yo soy el Alfa y la Omega, principio y fin, dice el Señor, el que es y que era y que ha de venir, el Todopoderoso.» (Apocalipsis 1:5-8).

Conclusión

Jesús es el origen de todas las cosas y sólo en él tienen sentido, él es el Alfa y la Omega, principio y fin.

Él, siempre existió y nunca tendrá final, él es el primogénito de los muertos y el soberano de los reyes de la tierra. Fuera de él no hay otro Dios. Él es el que estuvo muerto y vivió, él será nuestro juez en el final. «Yo soy el Alfa y la Omega, principio y fin, dice el Señor, el que es y que era y que ha de venir, el Todopoderoso.» (Apocalipsis 1:5-8).