Introducción
Luego de que Pedro y Juan le dieran sanidad a un cojo de nacimiento, fueron apresados por los principales sacerdotes, acompañados del jefe de la guardia del templo y los saduceos, el sumo sacerdote Anás, y Caifás y Juan y Alejandro, los interrogaron diciendo: «…¿Con qué potestad, o en qué nombre, habéis hecho vosotros esto?.» (Hechos 4:7).
Entonces Pedro, lleno del Espíritu Santo, les dijo: «sea notorio a todos vosotros, y a todo el pueblo de Israel, que, en el nombre de Jesucristo de Nazaret, a quien vosotros crucificasteis y a quien Dios resucitó de los muertos, por él este hombre está en vuestra presencia sano.» (Hechos 4:10).
Al no encontrar nada incriminatorio en ellos y viendo al hombre que había sido sanado, que estaba en pie con ellos, no pudieron decir nada en contra. Entonces decidieron soltarlos, pero antes los amenazaron para que ya no vuelvan a hablar en nombre de Jesús, pero Pedro y Juan no conformes con la amenaza, respondieron así; juzguen ustedes mismos, si es justo delante de Dios obedecer a ustedes antes que a Dios; «Y llamándolos, les intimaron que en ninguna manera hablasen ni enseñasen en el nombre de Jesús. Mas Pedro y Juan respondieron diciéndoles: Juzgad si es justo delante de Dios obedecer a vosotros antes que a Dios; porque no podemos dejar de decir lo que hemos visto y oído.» (Hechos 4:19 -20).
Aspectos esenciales sobre el tema en el nombre de Jesucristo de Nazaret Hechos 4:32-37
- Con el poder de Dios, a través de su hijo Jesucristo, él rey de reyes y señor de señores. «…¿Con qué potestad, o en qué nombre, habéis hecho vosotros esto?.» (Hechos 4:7).
- En el nombre del rey, del poderoso, del único y digno de toda alabanza, Jesucristo. «…en el nombre de Jesucristo de Nazaret…» (Hechos 4:10).
- Nuestras acciones hechas en nombre de Jesús, despertaran celo y preocupación en los demás. «Y llamándolos, les intimaron que en ninguna manera hablasen ni enseñasen en el nombre de Jesús.» (Hechos 4:33).
- Obedecer a Dios antes que a los hombres. «…Mas Pedro y Juan respondieron diciéndoles: Juzgad si es justo delante de Dios obedecer a vosotros antes que a Dios…» (Hechos 4:34).
Conclusión
Tenemos poder en Dios, a través de su hijo Jesucristo. Jesús nos prometió que haremos mayores cosas que él; «De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras que yo hago, él las hará también; y aún mayores hará, porque yo voy al Padre. Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo. Si algo pidiereis en mi nombre, yo lo haré.» (Juan 14:12-14).