Introducción
Jesús dice: «Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre sino por mí» (Juan 14:6).
Y también Jesús se refiere a sí mismo como a una puerta: «Yo soy la puerta, si alguien trata de entrar en cualquier otra forma, es un ladrón y un bandido.» (Juan 10: 1)
Y Lucas en Hechos nos dice: «Y en ningún otro hay salvación, porque no hay otro nombre bajo el cielo dado a los hombres, en el cual podamos ser salvos.» (Hechos 4:12)
Sólo hay una manera de ser salvo, sólo hay una persona que es el Salvador, por lo tanto, la fe en Él y la obediencia es necesaria para la salvación.
Aspectos esenciales sobre el versículo de Hechos 4:12
- Sólo en él encontramos la salvación, no hay otro, él es el único. «Y en ningún otro hay salvación…» (Hechos 4:12)
- Sólo su nombre a sido proclamado a los cielos, sólo su nombre ha sido dado a los hombres, sólo su nombre conocemos. «…porque no hay otro nombre bajo el cielo dado a los hombres, en el cual podamos ser salvos.» (Hechos 4:12)
Conclusión
Sólo Cristo es el camino y sólo él es la puerta, sin él no hay salvación. No hay otra forma de entrar; no hay otras maneras.
Cualquier desviación de la persona de Jesucristo, la obra de Jesucristo, o el evangelio de Jesucristo por la fe y la gracia, te llevará al infierno. Usted debe comprometerse a venir a Cristo porque Él es el único camino.