Jesús sana a muchos enfermos (Mateo 15:29-31) – Bosquejo Bíblico

Introducción

Después de que Jesús liberó a la hija endemoniada de una mujer cananea, él se dirigió a la región de Galilea y junto al mar subió a un monte y se sentó allí. Y sabiendo las personas que él se encontraba sentado en el monte, se reunieron llevando toda clase de enfermos, para que él los sané; «Y se le acercó mucha gente que traía consigo a cojos, ciegos, mudos, mancos, y otros muchos enfermos; y los pusieron a los pies de Jesús, y los sanó.» (Mateo 15:29).

Su fama se había difundido por todos los pueblos que estaban alrededor de Galilea, él era el enviado de Dios para hacer milagros en su nombre. «Y Jesús volvió en el poder del Espíritu a Galilea, y se difundió su fama por toda la tierra de alrededor. Y enseñaba en las sinagogas de ellos, y era glorificado por todos.» (Lucas. 4:14).

Aspectos esenciales sobre Mateo 15:29-31

  1. Jesús subió al monte y se sentó ahí, él subió a un sitio alto y visible, donde todas las personas podían verlo y escucharlo. «Pasó Jesús de allí y vino junto al mar de Galilea; y subiendo al monte, se sentó allí.» (Mateo 15:29).
  2. Las personas oyeron de los milagros de Jesús y creyeron en él. «Y se le acercó mucha gente que traía consigo a cojos, ciegos, mudos, mancos, y otros muchos enfermos; y los pusieron a los pies de Jesús, y los sanó.» (Mateo 15:30).
  3. Vieron el poder de Dios y se maravillaron, luego empezaron a glorificar a Dios. «de manera que la multitud se maravillaba, viendo a los mudos hablar, a los mancos sanados, a los cojos andar, y a los ciegos ver y glorificaban al Dios de Israel.» (Mateo 15:31).

Conclusión

Jesús todavía está sentado en lo más alto del monte, escuchando a las personas. Él es el mismo, no ha cambiado, él quiere sanar nuestras vidas y también nuestros cuerpos. Él es nuestro sanador

Jesús nos llama, él quiere que nos acerquemos con nuestras dolencias, nuestras enfermedades, quiere sanarnos, como sanó a muchas personas.