La voz humana es algo maravilloso, un perro puede ladrar, un pájaro puede gorjear, pero un hombre puede hablar, porque Dios le ha dado el maravilloso don del habla. Con este don, el hombre puede orar, puede cantar alabanzas a Dios y puede predicar las inescrutables riquezas de Dios.
Pero, ¿alguna vez has pensado en la voz de Jesús? Apocalipsis dice que su voz era como «el sonido de muchas aguas». Habló desde los barcos, desde las montañas, desde los caminos, desde el templo, desde los hogares y hasta desde la cruz.
Pero más importante que el sonido de su voz es lo que dijo con voz, habló verdades eternas .
I-JESÚS HABLÓ PALABRAS SOBRE LA SALVACIÓN: MARCOS 1:15, JUAN 14:6
II-JESÚS HABLÓ PALABRAS SOBRE EL PECADO: JUAN 8:34
III-JESÚS HABLÓ PALABRAS SOBRE LAS ESCRITURAS: MATEO 4:4
IV-JESÚS HABLÓ PALABRAS SOBRE LA SÚPLICA: LUCAS 18:1
V-JESÚS HABLÓ PALABRAS SOBRE EL SERVICIO: LUCAS 9 :23
VI-JESÚS HABLÓ PALABRAS SOBRE SU SEGUNDA VENIDA: JUAN 14:2-3
Hace muchos años cerca de la residencia real inglesa en la Isla de Wight había varias casas para los pobres y los ancianos. Un misionero, que visitaba a algunos de los ancianos un día, le preguntó a una dama: «¿Alguna vez la reina Victoria los visita aquí?» «Oh, sí», fue la respuesta, «Su Majestad viene a vernos con frecuencia». Entonces, preguntándose si la mujer era cristiana, el misionero preguntó: «¿Visita aquí alguna vez el Rey de reyes?» La señora inmediatamente le dedicó una sonrisa feliz y cómplice y respondió: «No, señor, Él no visita aquí; alabado sea Dios, Él vive aquí. ¡Es por eso que estamos tan ricamente bendecidos!»